Edificio de tres pisos más un torreón con fachada a la calle Provisiones y un patio interior al cual se distribuyen
la mayoría de las viviendas.
El estado previo a la intervención era de elevado deterioro estructural, de las instalaciones y de las condiciones
higiénicas. Todas las habitaciones que no se abrían a la corrala carecían de iluminación y ventilación
natural y había un único aseo compartido por planta.
La distribución y superficies de las viviendas se modificaron: el edificio original disponía de 22 infraviviendas
y se pasó a 11 viviendas de 1 y 2 dormitorios manteniendo los 2 locales comerciales que ya existían.
El proyecto de rehabilitación se centró en el patio común como fuente de luz y núcleo de comunicación, dotándolo
de un ascensor recubierto de vidrio de colores para potenciar así la luminosidad del patio.
El muro medianero del patio se trató como un lienzo especial donde reflejar algo de la historia del barrio.
Se encargó a un grupo de jóvenes artistas el trabajo y, ellos, investigando, descubrieron que “El Cigala”
vivió en la Calle Provisiones cuando era niño, y tomaron el flamenco como tema central para el graffiti.
En el año 2006, recibió el 2º Premio Iberoamericano en Patrimonio Edificado, otorgado
en Buenos Aires por el Centro Internacional de Conservación del Patrimonio y la Sociedad de Arquitectos.