Del conocido como Palacio del Marqués de Molins o Palacio de los Molins, nada se sabe de sus orígenes y
poco de su historia, aunque se estima que su construcción es anterior a 1830.
Este edificio de alto grado de protección arquitectónica se desarrolla entre medianeras y cuenta con un
cuerpo principal de 4 plantas sobre rasante y una planta sótano con patio central, un patio posterior,
ocupado casi en su totalidad por un edificio anexo de dos plantas construido a mediados del siglo XX, y
un patio lateral izquierdo.
Está documentada una reforma en 1919 donde la mayor parte del edificio pasaba a destinarse a la actividad
docente, manteniéndose en uso hasta su desalojo en 2018 para adoptar medidas de seguridad urgentes e
iniciar una rehabilitación integral.
El esquema funcional planteado en el Proyecto de Rehabilitación se estructura a partir de dos ejes de
comunicación vertical principales (uno de nueva construcción), que se constituyen en escaleras de
evacuación, conectadas en cada planta mediante una circulación perimetral, de manera que el edificio
cuente con dos accesos independientes, siendo uno de ellos accesible.
La redistribución de espacios proyectada ajusta las aulas a las superficies requeridas ubicándolas para
disponer de luz natural en la fachada principal y patios interiores. Las aulas de infantil se sitúan en
planta primera y las de primaria en planta segunda y tercera. También se traslada el comedor de la
ubicación actual a la planta baja y se habilita un nuevo espacio de recreo al aire libre en el patio
interior.
En planta tercera se emplazan las aulas de mayor superficie, aprovechando los espacios que la
construcción de la cubierta del edificio ofrece: gimnasio y vestuarios, aula polivalente + música y aula
de informática. También se disponen en esta planta, en la crujía de la fachada principal, dirección y
jefatura de estudios.
De una manera resumida, las actuaciones de adecuación sobre la superficie de 3.174,48 m2 consistirán en:
- Conservación y puesta en valor de los elementos singulares y de restauración obligatoria conjugada
con la mejora de las condiciones térmicas y acústicas de las estancias.
- Compartimentación del espacio para su adaptación a los usos del programa educativo e incorporación
de un sistema de acabados que se ajustan a los requisitos de funcionalidad, seguridad y
habitabilidad más actuales.
- Revisión y renovación de todas las instalaciones existentes con la incorporación de un sistema de
ventilación con recuperadores para la renovación y filtrado del aire interior que mejora las
condiciones de salubridad además de apoyar la eficiencia del sistema de climatización.